jueves, 8 de octubre de 2009

Off view Raddy Leizagoyen comenta eliminación de Uruguay en sub 20


Uruguay le dijo adiós al Mundial Sub ‘20
Un Brasil contundente y netamente superior, eliminó a Uruguay del Mundial Sub ’20. Con 3 goles en 9, los norteños establecieron una clara diferencia física, técnica y anímica, sobre un equipo celeste atado por la responsabilidad, impreciso y sin convicción. Sin embargo, cuando temíamos que como tantas veces llegara la indisciplina, el descontrol y la vergüenza, los chicos de Aguirre apelaron a todas sus reservas espirituales y con gran hidalguía siguieron luchando, descontaron, decoraron el resultado y terminaron haciendo un papel decoroso en lo que pudo ser un papelón.

CUANDO BRASIL SE SUELTA

Uruguay sumó hombres en el mediocampo (Calzada, Pereira, Diego Rodríguez, Lodeiro, Urretaviscaya) para tratar de cortar el circuito futbolístico brasileño. Bien plantados atrás y con Abel Hernández como navegante solitario, Uruguay realizó un planteo avaro pero adaptado a la peligrosidad del rival. En los primeros minutos dio resultado.
Brasil tocaba sin trascendencia, pero no llegaba con peligro. Uruguay perdía muchas pelotas y eso le impedía acercarse a la ultima zona adversaria. Hasta que promediando el primer tiempo, Urretaviscaya intenta irse entre tres rivales, se la roban, nace un contragolpe a toda velocidad; Paulo Enrique la cruza a la derecha a espaldas de la zaga y Alan Kardec remata cruzado al caño derecho para abrir el score.
Uruguay no pudo asimilar ese tremendo golpe, porque pasaron poco más de 100 segundos (incluido festejo, movida, etcétera) y ya vino el segundo: otro ataque por derecha, Alex Teixeira la juega profundo para la subida del marcador Douglas, éste se la tira por un costado en el área a Cabrera y la busca por el otro, llega como una flecha y manda el envío atrás, hacia el medio, por donde entraba el propio Teixeira para fusilar al portero con disparo alto.
Brasil sacó a relucir toda la gama de recursos, toques, pisadas y ese repertorio de fantasía que muestran con su pizarrerismo proverbial. Martín Rodríguez le sacó un tiro espectacular al capitán Giuliano. Y apenas pasada la media hora, otro contragolpe letal por derecha, pase profundo a Teixeira que escapa en acción individual a Silva, se cruza en diagonal y define de zurda, alto, a la derecha: 3 a 0.
REACCIONA URUGUAY
Los celestes sacudieron la melena y salieron a seguir disputando cada pelota con la misma fuerza, pero sin excesos. Brasil bajó resoluciones con el partido prácticamente definido y las acciones se emparejaron. Uruguay se le vino encima. Mauricio Pereira jugó bajo por la izquierda para Abel Hernández que desbordó y remató bajo. Tapó el guardameta Rafael y el propio Hernández tomó el rebote y la cruzó profunda, para que Urretaviscaya sobre la línea misma, la punteara a la red.
En los minutos finales de la etapa inicial, Uruguay demostró que aún estaba vivo y podía esperarse un milagro. Un pelotazo profundo para Urretaviscaya fue anticipado in extremis por Rafael que chocó y quedó lesionado; y una pirueta de Hernández en el área, tras pase de Lodeiro y centro de Urretaviscaya, fue controlado a duras penas por el portero brasileño.
Para el complemento Aguirre se mostró audaz y se jugó el todo por el todo sustituyendo a un volante (Maximiliano Calzada) por un delantero (Tabaré Viudez). Se sacrificó marca para sumar hombres en ofensiva y Brasil encontró espacios, pero no estuvo fino en la última maniobra y los de uruguayos seguían vivos. El partido cobró dramatismo si bien no era bien jugado, porque parecía que en cualquier momento podía liquidarlo Brasil o descontar Uruguay.
Aguirre jugó una carta más con el ingreso de Santiago García, pero la acumulación de delanteros (como le pasaba a Mario Saralegui con Peñarol en sus peores momentos) no alcanza para inclinar la cancha sobre la valla rival. Hasta que en el minuto 41, un puntapié por torpeza de Souza a Cabrera en el área, fue sancionado con penal que desperdició Hernández al rematarlo de manera muy anunciada, lo que facilitó la contención de Rafael.
Y ahí naufragó la última esperanza celeste. Un gol ahí le hubiera dado emoción a los minutos finales, pero al no poderse descontar, el triunfo brasileño, justo y merecido, quedó consolidado. De esta manera culmina un largo proceso de estos muchachos de Diego Aguirre, que siempre dejaron la sensación de dar más –desde el Torneo Sudamericano– pero que quedaron ahí, a medio camino, sin nada importante, más que esta participación en un Mundial que para el nivel actual de nuestro fútbol no es poco, pero que para el ramillete de figuras que integraban este plantel, tiene sabor a insuficiente.
LOS DETALLES: BRASIL 3 – URUGUAY 1. Puerto Said (Egipto). ÁRBITROS: Marco Antonio Rodríguez, José Luis Camargo y Alberto Morín (México). BRASIL: Rafael; Douglas, Dalton, Rafael Toloi y Diogo; Paulo Enrique (61’ Boquita), Maylson (49’ Renán), Souza y Giuliano; Alan Kardec (79’ Maicon) y Alex Teixeira. D. T. Rogerio. URUGUAY: Martín Rodríguez; Adrián Gunino, Marcelo Silva, Sebastián Coates y Leandro Cabrera; Maximiliano Calzada (46’ Tabaré Viudez), Diego Rodríguez y Mauricio Pereira (62’ Santiago García); Jonathan Urretaviscaya y Nicolás Lodeiro; Abel Hernández. D. T. Diego Aguirre. GOLES: 1er. Tpo. = 21’ 36” Alan Kadec (B); 23’ 27” y 30’ 48” Alex Teixeira (B); 35’ 10” J. Urretaviscaya (U). NOTA: 87’ Rafael (B) atajó penal a A. Hernández (U). AMONESTADOS: 9’ A. Kardec (B); 26’ S. Coates (U); 29’ M. Pereira (U); 38’ Maylson (B); 45’ + 2’ D. Rodríguez (U); 63’ R. Toloi (B); 78’ L. Cabrera (U); 86’ Souza (B).

R. Leizagoyen

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