martes, 20 de octubre de 2009

Últimos apuntes sobre el Mundial Sub ‘20, por Raddy Leizagoyen


Finalizamos esta cobertura especial del Mundial Sub ‘20 que se disputó en Egipto y que finalizó el pasado viernes con la consagración de Ghana, que venció en la final a Brasil y al que los grandes medios de difusión más o menos siguieron con interés hasta que Uruguay quedó eliminado, y después fue como si se hubiera terminado abruptamente.

GHANA Y BRASIL DEFRAUDARON


La esperada final entre dos equipos de juego ofensivo, audacia y creatividad, para definir el Campeonato Mundial Sub ’20 disputado en Egipto, prometía una jornada de fiesta para el fútbol Mundial.

Pero Ghana y Brasil defraudaron las expectativas, protagonizando 120 minutos de fútbol avaro, demasiado timorato y sin emociones.

Ghana fue gran culpable de esta situación, pues entró con una táctica absolutamente defensiva, regalando la iniciativa a Brasil que, por su parte, no pudo quebrar la sólida resistencia de los africanos.

Ni siquiera cuando a los 37’ del primer tiempo, fue exageradamente expulsado un volante de Ghana, lo que dio una ventaja extra a los sudamericanos. Sin embargo, la inferioridad numérica no influyó demasiado. Apenas si sirvió para justificar la extremada prudencia de los campeones de África.

Así transcurrió el tiempo reglamentario y el suplementario y se llegó a los penales.

A BRASIL SE LE ESCAPÓ EL TÍTULO


Alan Kardec, Giuliano y Duglas Costa convirtieron consecutivamente sus remates desde el punto de penal, con remates precisos e inatajables. André Ayew y Samuel Incoom, también fueron certeros y contundentes.

Pero el panorama se empezó a oscurecer para Ghana cuando el de Jónathan Mensah fue atajado por Rafael a su derecha.

Souza pudo sacar ventaja decisiva para Brasil, pero su disparo a la derecha fue atajado por Daniel Agyei que empezó a constituirse en decisivo. Le tocó el turno a Bright Addae que podía empatar con el penúltimo penal, pero su disparo débil y a la izquierda, lo atajó Rafael.

Maicon tuvo en sus pies el título con el último penal de la tanda. Ahí fracasó estrepitosamente, con un balazo muy alto que se fue a la tribuna.

El goleador Dominic Adiyiah tuvo la gran responsabilidad de empatar y prolongar la definición y no falló: violento disparo alto, a la derecha.

Ahora era a un remate por equipo hasta definir. Vino Alex Teixeira, el que cuando nos iban ganando 3 a 0, la mostraba, la pisaba y la amasaba ante nuestros defensores. Llegó sin convicción, con el peso de la enorme responsabilidad, y su disparo a la izquierda fue atajado por Daniel Agyei.

Y entonces el del nombre más largo del torneo, Emmanuel Agyemang-Baddú, con total serenidad, tiró bajó, a la izquierda, bien al rincón de abajo y le dio el título a los africanos.

LA FIGURA


Dominic Adiyiah, que convirtió el último penal de la serie, fue considerado por FIFA como el Mejor jugador del Torneo y obtuvo el Balón de Oro; además fue el goleador del certamen con 8 goles en 7 partidos y obtuvo el Botín de Oro. Defiende, por ahora, a un equipo noruego, pero su futuro se perfila para alguna Liga más poderosa.

EL CAMINO


Ghana llegó a la final tras vencer a Uzbekistán por 2 a 0 y a Inglaterra por 4 a 0. más un empate con Uruguay 2 a 2.

En Octavos de Final, derrotó a Sudáfrica 2 a 1; en Cuartos dio cuenta de República Checa por 3 a 2 y en Semifinales, de Hungría por idéntico marcador.

Brasil, por su parte, goleó 5 a 0 a Costa Rica, empató sin goles con República Checa y derrotó a Australia 3 a 1.

En Octavos venció a Uruguay 3 a 1; en Cuartos, dio vuelta un partido sobre el final ante Alemania y lo liquidó al comienzo del alargue, por 2 a 1; y en Semifinales apenas venció al mismo Costa Rica que había goleado en el debut, por 1 a 0.

UZBEKISTÁN


En este cambiante mundo actual, es difícil mantener los conocimientos geográficos y más aún, los geopolíticos. De nuestros tiempos de estudiantes, ya no existen nada menos que la U.R.S.S., Yugoslavia, Checoslovaquia, el Congo Belga, etc.; Pekín se convirtió en Beijing; y han nacido países “nuevitos” como Croacia, Servia y muchos más. Es casi imposible para un común de los mortales, recordarlo todo y diferenciarlo. Pero cuando en el camino de Uruguay se cruzó Uzbekistán, no pudimos menos que tratar de saber algo sobre este país. Y de lo que aprendimos, a través de Internet, compartimos algo, que para esto también sirve el fútbol. La República de Uzbekistán es un país situado en Asia Central. Limita al norte y noroeste con Kazajistán, al sur con Afganistán, al noreste con Kirguistán, al sureste con Tayikistán y al suroeste con Turkmenistán. Durante siglos, el actual territorio de Uzbekistán estuvo integrado intermitentemente en el Imperio Persa. Antes de la llegada gradual de invasores turcos, el área estuvo poblada por elementos escitas y gentes de habla persa y de estirpe iraní, que aún comprenden una gran minoría en Uzbekistán y son llamados hoy en día tayikos. Desde la Edad Moderna, los emiratos en que se dividía el país (Bujara, Samarcanda y otros) fueron estados tapón entre las aspiraciones persas y chinas, y posteriormente rusas.

A comienzos del siglo XIX, había unas 2000 millas que separaban a la India británica y las regiones remotas de la Rusia zarista. Gran parte de la tierra no aparecía en los mapas. A principios del siglo XX, Asia Central estaba firmemente en las manos de Rusia y a pesar de alguna resistencia a los bolcheviques, Uzbekistán y el resto de Asia Central se hicieron parte de la Unión Soviética.

El 1 de septiembre de 1991, Uzbekistán declaró la independencia de mala gana. Mientras las repúblicas bálticas llevaban la lucha por la independencia, los estados del Asia Central tenían miedo de ella. Constitucionalmente, el Gobierno de Uzbekistán establece la separación de poderes, la libertad de expresión y la democracia representativa. En realidad, el ejecutivo detenta casi todo el poder. El poder judicial no destaca por su independencia y el parlamento (Oliy Majlis), que se reúne solamente unos cuantos días al año, tiene poco poder para dar forma a las leyes.

Uzbekistán es formalmente un aliado de Estados Unidos de América, teniendo bases militares de este país desde que EE. UU. invadió Afganistán. Uzbekistán cubre 447.400 km², una superficie similar a la que ocupan Marruecos o Suecia. Se extiende 1425 kilómetros de este a oeste y 930 de norte a sur. Principales exportaciones: algodón, oro, gas natural, fertilizantes minerales, metales ferrosos, textiles, vehículos de motor. Ingreso anual per cápita: U$S 420 (Banco Mundial, 2003). Uzbekistán es el país más poblado de Asia Central. Sus 25 millones de personas, concentradas en el sur y este del país, son casi la mitad de la población total de la región. Había sido una de las repúblicas más pobres de la Unión Soviética; gran parte de su población estuvo comprometida en el cultivo del algodón en comunidades rurales pequeñas. La población continúa siendo fuertemente rural y dependiente del cultivo para su sustento.

Y POR ÚLTIMO


A menudo se critica a Tenfield, su poder, su dominio del fútbol que se ha extendido a otras actividades (básquetbol, ciclismo, carnaval). Los derechos televisivos de este Mundial, no fueron adquiridos por Tenfield. La empresa que los obtuvo, promocionó muy mal las transmisiones; logró muy escasa publicidad; y tuvo un relator único para los 52 partidos; incluso en una de las semifinales, estuvo solo, sin comentarista.

Muy pobre cobertura. Y hay que decirlo: nada que ver con Tenfield. Por más que Paco despierte antipatías –y, ¿por qué no?– muchas envidias, en un país que difícilmente perdona el éxito de los que vienen de abajo.

R. Leizagoyen

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