Cerro cumplió, pues; y más que eso: hizo un partido inteligente. Sin cerrarse atrás, pero sin "regalarse", conteniendo al local en el mediocampo, desactivó progresivamente al Emelec, que en los 45` iniciales sólo inquietó con un par de remates de distancia ejecutados por Ayoví y Pablo Pérez.
Si acaso, el otro que inquitó algo a los albicelestes fue Rojas, que en el primer tiempo desbordó en algunas ocasiones por la izquierda y luego, en el complemento, cuando Cerro ya ganaba 2-0, como también en los pasajes de los 20` finales, en los que se dedicó a cuidar la mínima diferencia, lo hizo con mayor peligro por el costado izquierdo de la ofensiva de los "elécricos".
Sin embargo, Cerro defendió a pie firme, ya en el segundo tiempo fue desdoblándose con prolijidad y sentido colectivo hacia el arco de enfrente y, de esa manera, con el gol anotado por Pablo Caballero primero, y el balazo que luego metió Dadomo tras la ejecución corta de una pelota quieta, dio la sensación de que hasta iba a ganar con luz, cómodamente.
No fue así, porque Pablo Pérez puso el 2-1 con un golpe de cabeza, ante uno de los tantos centros con los cuales el visitante sufrió -innecesariamente- en el cuarto de hora final del encuentro, donde Rojas desbordó en varias oportunidades a Leites.
Aún así, apurado por el local, Cerro no perdió pie, fue inteligente como en el primer tiempo y no permitió que, en este caso el acierto de ningún jugador locatario, "firmara" el empate, como había dicho Repetto, lo que terminó por hacerle "saltar los tapones" a los "eléctricos".
Posiciones del Grupo 5: Cerro 6 unidades, Inter de Porto Alegre 4, Deportivo Quito 1 y Emelec 0.
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